Es un sistema digital que traduce el lenguaje en pulsos luminosos que se encienden y se apagan millones de veces por segundo mediante bombillas leds.
A través de ese parpadeo, y según los investigadores, se pueden crear redes inalámbricas que posibiliten acceder a Internet a unos 500 Mbs por segundo, lo que podrá multiplicar por cinco los tránsitos que aun hoy ofrecen las líneas de fibra óptica. Se trata de transmitir datos mediante luz en vez de hacerlo a través de radiofrecuencias. Esto es, que los leds de cada bombilla se encienden y apagan a tal velocidad que no lo percibirá el ojo humano con lo que, difícilmente pueda llegar a ocasionar ningún daño.
A esta tecnología se le conoce también como Comunicación de Luz Visible y, aunque aún está en fase experimental en la Universidad de Edimburgo, se vaticina que puede ser la tecnología que deje al Wifi en un segundo plano.
Además se estima que su uso será diez veces más barato que el WiFi e incluso más seguro, dado que los impulsos de luz no podrán atravesar las paredes.
Para utilizar esta tecnología es necesario un router luminoso capaz de emitir una señal binaria, el cual se puede adherir de forma sencilla en cualquier bombilla eléctrica convencional. Por otra parte, según los investigadores, los impulsos son captados por cuantos receptores luminosos se precisen y estén instalados en todo tipo de dispositivos conectados. Estos pueden ser desde los ordenadores, tabletas, móviles, televisores o electrodomésticos.
