La decisión que han tomado los británicos podría suponer restricciones al libre comercio entre países, así como a la libre circulación de mercancías y personas.
El Reino Unido se ha mostrado a favor de abandonar la Unión Europea en el referéndum celebrado este jueves 23 de junio. Con un 51,9% de votos favorables al Brexit, los británicos pueden ya activar el artículo 50 del Tratado de la Unión Europea para iniciar el proceso de separación.
Aunque aún se desconoce si las autoridades completarán finalmente los trámites para abandonar la UE, todo apunta, tras el resultado de la votación y la dimisión del primer ministro, David Cameron, a que se respetará la decisión de los ciudadanos.
Esto ha provocado una caída en los mercados y una gran incertidumbre en numerosos sectores, como la logística, que puede verse seriamente afectada por esta situación, sin precedentes.
En primer lugar, Reino Unido presenta un gran volumen de exportaciones e importaciones hacia y desde la Unión, donde se encuentran sus principales socios comerciales.
Sin embargo, el Brexit supone que estos acuerdos entre países deberán ser renegociados, lo que podría significar la implantación de aranceles y por tanto, una subida de los precios en los productos importados y exportados, así como un descenso en los movimientos entre fronteras.
De este modo, al disminuir el nivel de intercambios comerciales con el país, se reduciría también la demanda de servicios logísticos, conduciendo a una caída de la industria.
Libre circulación entre países
Por otro lado, la decisión de los británicos podría afectar, en gran medida, a la libre circulación entre países de la Unión Europea. Actualmente, el nivel de restricciones e interrupciones es mínimo, pero si Reino Unido deja la UE, sus ciudadanos necesitarán el pasaporte para viajar a los mismos lugares, pasando por controles más rigurosos.
También aumentarán los periodos de entrega de algunos productos, ya que será necesario realizar más trámites burocráticos para atravesar las fronteras. Esto conlleva un aumento de los precios, y de nuevo, una reducción del negocio logístico.
Por este motivo, es importante que las empresas del sector comiencen a desarrollar una estrategia para hacer frente a los retos que tienen por delante con el fin de que la salida de los británicos del libro comercio y la libre circulación les afecte lo menos posible.
Fuente: Cadena de suministro
