La regulación que afecta al transporte de mercancías se verá afectada en caso de un Brexit duro, por lo que se habilitará un sistema de declaración previa en las aduanas a cada lado del Canal.
Desde que en 2016 se votara en Reino Unido el referéndum para decidir su continuidad en la Unión Europea, Eurotunnel ha trabajado con los dos equipos de gobierno que han gestionado el proceso para seguir proporcionando unos servicios rápidos y ágiles a través del Canal de la Mancha, independientemente de lo que ocurra el 31 de octubre.
Para los 22 millones de pasajeros que utilizan los servicios Shuttle y Eurostar, no se producirán cambios en cuanto a los trámites de inmigración que deben pasar hoy en día, aunque estarán disponibles en las terminales nuevos servicios para la devolución del impuesto del IVA, por si fueran necesarios.
En cuanto a las mercancías, la regulación se verá afectada en caso de un Brexit duro, por lo que se habilitará un sistema de declaración previa en las aduanas a cada lado del Canal, concretamente en Folkestone y Coquelles.
Para poder seguir prestando el servicio actual a los 5.000 camiones diarios que utilizan esta infraestructura, se ha invertido en la creación de dos puntos en estas zonas, en las que se realizarán los chequeos y controles necesarios antes del embarque.
En el futuro, también se podrán revisar allí los documentos aduaneros. Los trabajadores, especialmente formados para este tipo de funciones, serán capaces de inspeccionar hasta 20 camiones a la vez en sólo unos minutos.
Para los vehículos que las autoridades quieren inspeccionar con más detalle, se ha invertido en una zona de control fitosanitario en la terminal de Coquelles, con nueve muelles y 100 plazas de aparcamiento. Además, se ha construido un parking seguro de 240 plazas para los vehículos que se dirigen al Reino Unido y se contratará un servicio de apoyo para ayudar a los conductores.
Fuente: www.cadenadesuministro.es