Adif ha dado el primer paso para deshacer el entuerto creado en el Centro Logístico Ferroviario de Zaragoza-PLAZA tras anunciar el viernes su decisión de volver a licitar la gestión de la terminal, en este caso por cuatro años y 1,9 millones de euros, frente a los 10 años y 5,2 millones licitados en el primer concurso, que a mediados de enero decidió suspender.
Cuatro meses después de decidir la suspensión de la primera licitación, Adif ha vuelto a sacar a concurso la gestión y explotación del Centro Logístico Ferroviario de Zaragoza-PLAZA.
En esta ocasión, Adif licita la manipulación de UTIs y otros servicios asociados a riesgo y ventura por un periodo de cuatro años con posibilidad de prórrogas por periodos anuales hasta un máximo de dos años.
Además, ha fijado el importe mínimo de licitación en 1,97 millones de euros.
Estas cifras contrastan con las del primer concurso de licitación, que Adif decidió abortar a mediados de enero, días antes de abrir las plicas económicas de las tres ofertas que se habían presentado y que estaban lideradas por Tercat, TMZ Services y Noatum. Entonces, el plazo de licitación del concurso eran 10 años y por un importe mínimo de 5,26 millones de euros, con lo que la reducción en esta nueva licitación es notable.
Adif paralizó en su día este proceso a la par que se produjo el nombramiento a mediados de enero del nuevo presidente de Adif, Gonzalo Ferre, y con el argumento de que necesitaba “replantear el modelo y los criterios de licitación”.
Con este concurso, Adif pone a disposición de la empresa adjudicataria los siguientes recursos: un espacio operativo de 75.000 metros cuadrados, cinco vías de 750 metros operativas bajo pórtico y una vía auxiliar de 670 metros. Igualmente, dispone de una grúa pórtico 1-6-1, una oficina de control de acceso de 90 metros cuadrados y una nave de mantenimiento de 435.
El Centro Logístico de Zaragoza-PLAZA cuenta con autorización de la Agencia Tributaria para el desarrollo de actividades aduaneras vinculadas con las figuras de ADT/LAME, siendo Adif el titular de esta autorización, y puede acordar con el adjudicatario, si está interesado, la forma de prestación de estos servicios aduaneros.