La subdirectora general de Gestión Aduanera, Mª Luisa González, clausuró el pasado viernes el curso de representante aduanero que organizan la Fundación Valenciaport y ATEIA-OLTRA Valencia.
La clausura de este curso, en el que se hizo entrega de diplomas a los alumnos, se celebró en el salón de actos de Valenciaport y contó con la asistencia del presidente de la Autoridad Portuaria de Valencia y de la Fundación Valenciaport, Rafael Aznar, y el gerente de la Fundación, Vicente del Río, así como la jefa de la Dependencia Regional de Aduanas e Impuestos Especiales de Valencia, Mª Vicente Abad, la inspectora coordinadora de la Delegación Especial de Valencia, Carmen Longares, el presidente de ATEIA, Luis Rosa, y la directora de Formación de la Fundación. Ana Rumbeu.
El presidente de Valenciaport destacó la importancia de la formación y recordó que la actividad económica exige que el comercio exterior fluya en favor de la recuperación. Además, agradeció la labor de ATEIA en favor de la formación.
Mª Luis González explicó las claves del Código Aduanero de la Unión (CAU), que se está ultimando y que será de aplicación plena el 1 de mayo de 106. “El nuevo código es ya una realidad y supone que se apliquen los mismos procedimientos y de la misma manera en todos los estados miembros”, señaló. Según González, entre los objetivos del código está el de simplificar y sistematizar la normativa aduanera, racionalizar los regímenes aduaneros y establecer la obligatoriedad de las transmisiones electrónicas. En este sentido, la aduana informatiza es uno de los fines prioritarios: “Las gestiones se deben efectuar de una forma ágil – explicó Mª Luisa González -. Desparece absolutamente el papel y sólo se mantiene para las pequeñas declaraciones verbales de viajeros y en el caso de que caiga el sistema informático”.
La subdirectora de Gestión Aduanera aseguró que España es uno de los paíes más preparados para la simplificación, puesto que “el despacho centralizado es ya una realidad” a la que los operadores están acostumbrados.
Por otro lado, recordó que en el texto se define claramente el papel de la Aduana. Por un lado, como elemento de control de todo el comercio internacional y, por otra parte, como responsable de velar por la seguridad de la cadena logística. Para cumplir estas misiones, entre los objetivos estratégicos de la Administración se encuentran la protección de los intereses financieros de la UE y los estados, la protección y la seguridad de los residentes, la protección de la UE ante el comercio desleal y el mantenimiento de un equilibrio adecuado entre el control aduanero y la facilitación del comercio internacional. “A finales de año la Administración lo tendrá todo listo, pero es imprescindible contar con los operadores, que deben estar proactivos. Os hemos echado de menos en todo este proceso. Creo que deberiáis haber participado más en defensa de vuestros intereses”, añadió González.
Fuente: veintepies.com
