Renovar las instalaciones para los camiones de 4,5 metros requeriría invertir 1.500 millones

Las organizaciones miembros del Comité Nacional de Transporte por Carretera (CNTC) se reunieron el martes para analizar, entre otros asuntos, el proyecto de modificación del Anexo IX del Reglamento General de Vehículos, impulsado por la DGT y por el que se pretende aumentar las dimensiones y las capacidades de carga máximas de los vehículos de transporte, con tres reformas esenciales: ampliación de la altura máxima a 4,5 metros, permiso de circulación para vehículos articulados de hasta 20,55 metros y autorización para circulación a composiciones de 25,25 metros y 60 tn de MMA.

Según la patronal CETM, con respecto a la altura máxima, el CNTC acordó por mayoría rechazar la propuesta “en base al riesgo que representa para la seguridad vial al incrementarse significativamente la posibilidad de vuelco, debido al aumento de la superficie de resistencia al viento y al desplazamiento del centro de gravedad de los vehículos, tal y como han expuesto públicamente diversos técnicos cualificados”.

A este respecto, el CNTC exigirá que para retomar la posible puesta en marcha de esta medida “un organismo público contrastado certifique que este tipo de vehículos no suponen un riesgo para dicha seguridad vial”.

En el hipotético caso de su entrada en vigor, desde el CNTC se advierte de que se exigiría una compensación económica por los costes necesarios para modificar y reacondicionar los muelles de carga de las instalaciones logísticas a las nuevas dimensiones.

De acuerdo con la información aportada por CETM y según un estudio realizado por la Asociación de Centros de Transporte de España (ACTE), los costes necesarios para adecuar las instalaciones ascenderían sólo en sus centros logísticos asociados a más de 1.500 millones de euros.

Con respecto a los vehículos articulados de 20,55 metros, el CNTC también acordó rechazar esta posibilidad al entender que supondría “un incremento injustificado de la oferta de transporte” además de requerir “cuantiosas inversiones en la compra de nuevos equipos” por parte de las empresas de transporte.

Por último, con respecto a los megatráileres, el CNTC, según CETM, acordó aceptar la puesta en marcha de pruebas piloto con los vehículos de 25,25 metros y 60 toneladas de MMA, “siempre y cuando exista una definición detallada y acordada por parte de la Administración con el CNTC de las condiciones previas que serán necesarias para el otorgamiento de las autorizaciones experimentales”.

Hay que advertir que la propuesta de la DGT se limita a hablar de circulación de este tipo de convoyes mediante “autorización previa”.

Ante este posicionamiento, CETM, patronal mayoritaria, ha recordado que “cualquier cambio de la normativa de pesos y dimensiones debe incluir una armonización a nivel europeo, al tiempo que se debe abrir un debate sobre otros asuntos de importancia para el sector del transporte como los plazos máximos de pago, la reducción de las restricciones al tráfico y cualquier otro asunto que represente ineficiencias que reduzcan la productividad de nuestras empresas”.

“Para ello, el sector del transporte está dispuesto a abrir una mesa de negociación y debate con las otras partes implicadas (Administración y organizaciones de cargadores) para tratar en profundidad y de manera conjunta estos asuntos”, afirmó la patronal.

Fuente: Diario del Puerto