El nuevo peaje que la Diputación Foral de Gipuzkoa va a implantar únicamente para los vehículos pesados y en “ningún caso a los vehículos ligeros”, aclaran en esta Administración, arrancará en enero de 2018. La iniciativa ha sido ya presentada, el proyecto será licitado este mes de julio y las obras comenzarán en 2017.
Para la diputada de Infraestructuras Viarias Aintzane Oiarbide, dos son los objetivos principales del establecimiento del peaje exclusivo para camiones en la N-1. En primer lugar, esta carretera soporta un tráfico diario de 12.000 camiones, de los que el 60% son extranjeros. “Los guipuzcoanos no podemos costear en exclusiva el mantenimiento y la mejora de esta infraestructura que se encuentra en el eje transeuropeo. El sistema AT garantiza que los camioneros foráneos abonen todo el trayecto, y que tenga la menor incidencia posible en los desplazamientos de los autóctonos por el interior de Guipúzcoa”, advierte la diputada.
Pero con esta medida, que a buen seguro va a encender los ánimos de los empresarios del sector, se pretende también trasvasar camiones desde la N-1 hasta las autopistas de peaje AP-8 y a AP-1, “lo que incidirá positivamente en nuestra red, descongestionando el tráfico de la N-1”, explican desde la Diputación Foral.
El nuevo peaje se instalará en tres puntos: Echegarate, Andoáin e Irún, con lo que únicamente abonarán el viaje completo los camiones que pasen por los tres puntos. “Teniendo en cuenta que en el tránsito por Andoáin se cobrarán únicamente dos kilómetros, se espera que la afección al tráfico interno será de menos de un euro”, avanzan los responsables de la iniciativa.
Posibles ayudas a camioneros “autóctonos”
Oiarbide revela también que tanto la propia Diputación de Gipuzkoa como Bidegi, la sociedad que gestiona los peajes en esta provincia vasca, han realizado un “gran esfuerzo” para disminuir la afección del nuevo peaje sobre los camioneros “autóctonos”, sin bien reconoce que Directiva Europea no permite realizar ningún tipo de bonificaciones en el peaje por razón de origen. Por ello, se ha comprometido a estudiar otro tipo de ayudas permitidas por la UE a los transportistas guipuzcoanos.
En cuanto a las características técnicas del denominado sistema AT que se va a instalar para el cobro de los nuevos peajes a camiones, está basado en el Free-Flow, y su funcionamiento consiste en la capacidad de identificación de los vehículos que pasan por diferentes equipos lectores. Así, en lugar de los habituales peajes con cabina, en la carretera se instala un pórtico metálico, similar al soporte de los carteles de información de mensajes variables. Sobre dichos pórticos se colocarán los equipos electrónicos de identificación de vehículos, que transmiten la información recabada a los sistemas de gestión.
De esta manera, cuando los camiones pasen bajo los pórticos, los sistemas podrán identificar los vehículos así como el trayecto, relacionándolos con el dispositivo, con lo que se realizará el cobro directamente por cuenta bancaria.
Para ello, será imprescindible que los usuarios adquieran un pequeño transmisor/emisor y lo instalen en el interior del vehículo, posibilitando el cobro del importe a abonar por el uso de la infraestructura. Al pasar por el peaje, el sistema identificará al usuario, y la transacción se realizará automáticamente.
Guitrans: “El transporte no puede asumir más costes”
La reacción de la organización guipuzcoana de transportistas Guitrans al anuncio de que el nuevo peaje ya no tiene marcha atrás ha sido fulminante. Para este colectivo, “el transporte no puede asumir más peajes, ni más costes que no tiene capacidad de repercutir en sus facturas”. En unos días, los representantes de Guitrans se reunirán con la Diputada de Infraestructuras para conocer de primera mano los pormenores del proyecto y defender que el transporte no puede asumir más costes, aseguran.
Fuente: todotransporte.com